“Hacer lo bueno”

 Tesalonicenses 5:21-22

Examinadlo todo; retened lo bueno.

Absteneos de toda especie de mal.

¿A qué te refieres ?pregunto Darío. Señalando la pulsera de Michelle.

¿Nunca viste antes una pulsera QHJ? – le pregunto ella

-No dijo _Dijo Darío -¿para qué es?

Michelle de repente recordó que Darío era nuevo en la iglesia y que probablemente no sabía del porqué de la pulsera QHJ.

_Las pulseras QHJ las usamos desde hace mucho tiempo, le explico, significa “¿Qué haría Jesús?”

-¿y para que la llevas puesta?-Pregunto Darío interesado

-bueno es que a veces  hay situaciones en las que  no se bien que hacer, como cuando Christian le pego a Geovanny en el estómago durante el recreo esta mañana –respondió Michelle.

-Eso fue feo –comentó Darío –los vi desde la cafetería ¿y que hay con eso?

-Christian y Geovanny son amigos, en términos generales, pero Geovanny le quito a Christian

Una golosina que tenía en su mochila. Ambos hicieron algo malo, porque Geovanny no debía haber tomado esa golosina y Christian no tendría que haberle pegado- dijo Michelle.

– ¿y qué haría Jesús?

Michelle contesto:

-Creo que habría hecho lo que hizo Katy. Katy le dio a Christian una golosina que tenía en su mochila y le dijo: “”No seas tonto. No vale la pena pelear por una golosina”

-¿crees que eso hubiera hecho Jesús? –quiero saber Darío

-bueno, quizá  no de la misma forma, pero si pienso que habría querido que Christian Geovanny  siguieran siendo amigos – dijo Michelle.

Me parece que me gustaría tener a Katy con migo –dijo Darío.

Recuerda:

“Por qué no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía” (2 Timoteo 1:7)

El camino de dios siempre es el buen camino. Pídele a Jesús que te indique que hacer cada vez que tengas dudas. Dile ¿Qué harías en mi lugar? ¿Qué harías en mi lugar? ¡Recuera que Dios  nos ha dado espíritu de dominio propio!

Autor: Carolina de Valle

www.devocionalinfantil.com

Recuerda:

“Por qué no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía” (2 Timoteo 1:7)

El camino de dios siempre es el buen camino. Pídele a Jesús que te indique que hacer cada vez que tengas dudas. Dile ¿Qué harías en mi lugar? ¿Qué harías en mi lugar? ¡Recuera que Dios  nos ha dado espíritu de dominio propio!