La protección de Dios – Carolina de Valle – Devocional Infantil
La protección de Dios
Lamentaciones 3:25
Bueno es Jehová a los que en el esperan, al alma que le busca.
El cielo se oscureció con nubarrones espesos ese día en el pequeño pueblo de Oklahoma. Los trueno asustaban a Rufo el perro de Adrián, que se escondía bajo la cama y aullaba. Adrián también se asustaba un poco con los rayos.
Los padres de Adrián desconectaron algunos aparatos eléctricos y escuchaban el pronóstico en la radio de baterías.
– A unos ochenta kilómetros al oeste de aquí se han visto nubes de tornado, y parece que se dirigen hacia nosotros – dijo el periodista – todos debemos buscar refugio.
Adrián, sus padres, su hermano, su hermana y Rufo, bajaron al sótano y se sentaron dentro de un armario grande lleno de provisiones de emergencias. La radio les decía que el tornado ya casi llegaba.
Minutos después oyeron lo que parecía un tren de carga sobre sus cabezas. La familia se abraso y Aarón oyó orar a su papá.
– ¿Están todos bien? – pregunto el papá cuando todo se calmó.
– Si – respondieron todos.
Cuando salieron descubrieron un desastre. Los dos autos y la mayor parte de la casa, había volado. Adrián quería vomitar. Su cuarto ya no estaba tampoco y tampoco podía ver ninguna de sus cosas.
– ¿Qué haremos ahora? – lloro su hermana.
– Llamaremos a nuestro agente de seguro – dijo el papá – y luego buscaremos donde pasar la noche. Mañana volveremos a rescatar lo que se pueda. Ahora sin embargo vamos a orar. Agradeceremos a Dios porque estamos todos vivos. Mientras estemos juntos y confiemos en la ayuda de Dios todo estará bien.
– ¿Y todas mis cosas? – pregunto Adrián.
– Todos perdimos cosas que nos gustaban – dijo mamá – pero las cosas se pueden reemplazar. Las personas no.
– No será fácil volver a empezar – dijo papá – pero si podemos sobrevivir a un tornado, creo que estaremos bien.
Recuerda:
“Siempre puedes confiar en Dios”
Autor: Carolina de Valle